lunes, 27 de mayo de 2013



El hombre de la foto se llama Dobri Dobrev, un veterano búlgaro de 98 años que perdió el oído durante la segunda guerra mundial. Vistiendo su ropa hecha por él mismo, camina los 10 kilómetros que separan su aldea de la capital Sofía, donde se pasa el día mendigando.
"En lo que parecemos, todos tenemos un juez; en lo que somos, nadie nos juzga."  -  Johann von Schiller


Aunque Dobri es bastante conocido en varias iglesias de la ciudad por sus postraciones de agradecimiento a todos los donantes, no fue hasta hace poco que se descubrió que donó hasta el último centavo que había recogido (más de 40.000 euros) para la restauración de los monasterios e iglesias de Bulgaria y para contribuir a pagar las facturas de agua y luz de los orfanatos. Vive de la humilde pensión mensual de 80 euros que le paga el Estado.

martes, 7 de mayo de 2013

Elegí la Vida


No quise dormir sin sueños:
y elegí la ilusión que me despierta,
el horizonte que me espera,
el proyecto que me llena,
y no la vida vacía de quien no busca nada,
no desea nada más que sobrevivir cada día.

No quise vivir en la angustia:
y elegí la paz y la esperanza,
la luz,
el llanto que desahoga, que libera,
y no el que inspira lástima en vez de soluciones,
la queja que se denuncia, la que se grita,
y no la que se murmura y no cambia nada.

No quise vivir cansado:
y elegí el descanso del amigo y del abrazo,
el camino sin prosas compartido,
y no parar nunca, no dormir nunca.
Elegí avanzar despacio, durante más tiempo,
y llegar más lejos,
habiendo disfrutado del paisaje.

No quise huir:
y elegí mirar de frente,
levantar la cabeza,
y enfrentarme a los miedos y fantasmas
porque no por darme la vuelta volarían.

No pude olvidar mis fallos:
pero elegí perdonarme, quererme,
llevar con dignidad mis miserias
y descubrir mis dones;
y no vivir lamentándome
por aquello que no pude cambiar,
que me entristece, que me duele,
por el daño que hice y el que me hicieron.
Elegí aceptar el pasado.
No quise vivir solo:
y elegí la alegría de descubrir a otro,
de dar, de compartir,
y no el resentimiento sucio que encadena.
Elegí el amor.

Y hubo mil cosas que no elegí,
que me llegaron de pronto
y me transformaron la vida.
Cosas buenas y malas que no buscaba,
caminos por los que me perdí,
personas que vinieron y se fueron,
una vida que no esperaba.
Y elegí, al menos, como vivirla.

Elegí los sueños para decorarla,
la esperanza para sostenerla,
la valentía para afrontarla.

No quise vivir muriendo:
y elegí la vida.
Así podré sonreír cuando llegue la muerte,
aunque no la elija...
...que moriré viviendo.

Rudyard Kipling

jueves, 2 de mayo de 2013

BUSCO


Miradas furtivas y miradas directas que son ciertamente las mismas.
Gestos breves que son auténticos comunicados, 
y roces que valen más que muchos abrazos. 
Busco choques inesperados capaces de parar la rutina del tiempo, 
y encuentros fortuitos que son como incendios. 
Simples tropiezos que se repiten y dicen. 
Busco en el autobús, 
en el metro, 
en el avión, 
en el tren 
o en el taxi. 
Tan sólo un casi. 

lunes, 22 de abril de 2013

Número 13

Ignorado en hoteles y deportes; rechazado en loterías; omitido en autobuses, aviones, calles y edificios; los supersticiosos lo temen, los triscaidecafóbicos lo sufren.

Pero nadie se acuerda que el 13 de enero de 1969 Los Beatles lanzaron el álbum The Yellow Submarine; que un día 13 nació Mickey Mause; que cada año la luna da 13 órbitas completas a La Tierra; y que un martes y 13 empezó la unificación de las dos Alemanias. Que el 13 de abril es el día mundial del beso y el 13 de septiembre el de mirar el vaso medio lleno (además de mi cumpleaños :D).

Y lo más importante: se necesitan 47 músculos para enfadarse y sólo 13 para SONREÍR.

viernes, 12 de abril de 2013

Esta es tu VIDA





Esta es tu vida. Haz lo que amas y hazlo a menudo. Si no te gusta algo, cámbialo. Si no te gusta a lo que te dedicas, déjalo. Si no tienes tiempo suficiente, deja de ver la televisión. Si estas buscando el amorde tu vida, para. Te estará esperando cuando comiences a hacer las cosas que se verdad amas. Deja de analizar, la vida es simple. Todas las emocionas son hermosas. Cuando comas, aprecia cada bocado. Abre tu mente, tus brazos y tu corazón a cosas nuevas y a la gente, nuestras diferencias nos unen. Pregúntale a la próxima persona que veas cuál es su pasión y comparte tu sueño con ella. Viaja a menudo. Perderte te ayudará a encontrarte a ti mismo. Algunas oportunidades sólo llegan una vez, aprovéchalas. La vida es parte de la gente que conoces y que te rodea; y de lo que puedas crear con ellos, así que sal y comienza a crear. Vive tu sueño y lleva puesta tu pasión. La vida es corta.

jueves, 7 de marzo de 2013


Nada ni nadie puede dañarte, sólo tú a ti mismo.
Se celoso de tu tiempo, porque es tu mayor tesoro.
Todos los grandes éxitos resultan de compartir,
amar y saber perseverar pensando en las metas
(las tuyas… por supuesto).
Siempre que culpes a los demás por tu situación;
te sentirás mal porque tu eres lo que eres por decisión tuya
(aunque no lo creas).
Vive todos los días como si fuera el primer día de tu vida
y trata con ternura a los que te rodean.
Ama a todos, incluso a los que te repudian,
el odio no te lo debes permitir.
Aprende que el que da con una mano…
posiblemente recogerá con las dos.
Recuerda que se necesita muy poco para llevar una vida feliz.
Mira hacia arriba. Camina siempre hacia adelante.
Aférrate a la vida con sencillez y recorre en silencio
tu sendero hacia la eternidad, con caridad y una sonrisa.

Todos tenemos el poder y la facultad de elegir,
nosotros somos capaces de gobernar nuestro propio destino
mediante nuestras decisiones: todo está en nuestras manos,
¡Hazte responsable! Tú tienes la gracia y/o la facultad de elegir.
Da algo de ti cada día al mundo en que vives, 
y tu vida aquí estará llena de armonía, satisfacción y amor.
No es necesario que seas famoso o un genio para cumplir
tu propio destino, todo lo que tienes que hacer es utilizar
tus facultades lo mejor que puedas.

Si eres hábil con el martillo “construye”;
Si eres feliz sobre las aguas: “pesca”;
Si la pluma es tu vocación ¡escribe!
Ahí donde tus fortalezas se ocultan aliméntalas
con disciplina y esfuerzo, que la recompensa es convertirse
en un ser inmensamente feliz.
El ser feliz no es un don que se les ha dado solo algunos,
es una heredad que se nos a brindado a todos,
sólo tienes que hacerla valer.

lunes, 4 de marzo de 2013



Nuestro mayor miedo no es que no encajemos, nuestro mayor miedo es que tenemos una fuerza desmesurada.

Es nuestra luz y no nuestra oscuridad lo que más nos asusta. Empequeñecerse no ayuda al mundo, no hay nada inteligente en encogerse para que otros no se sientan inseguros a tu alrededor.

Todos deberíamos brillar como hacen los niños. No es cosa de unos pocos sino de todos, y al dejar brillar nuestra luz damos permiso a otros para hacer lo mismo. Al liberar nuestro propio miedo, nuestra presencia libera automáticamente a otros.