martes, 23 de marzo de 2010

Por encima de las dicotomias...

Los debates y shows televisivos hablan de seducción, y no se resisten, caen fácilmente en la dicotomía…

o eres un buenazo o eres un chico Malo.
Rápido salen diversos ejemplos, risas, mofas, trucos y por supuesto, chicos malos que saben serlo.

Esta dicotomía con sus respectivos “beneficios”, hace que muchos chicos copien un esquema muy simplificado del machito, una idea muy inmadura y que suele cursar con bastante prepotencia y testosterona por las venas. Por miedo a caer el el prototipo del buenazo se convierten en todo lo contrario, tipos duros.
¿A caso hay algo en el medio? ¿El hombre íntegro? Para nada.

Si lo hay, el resto de hombres: ni divertidos ni aburridos, con algo que contar y llenar el incómodo silencio, sin disciplina pero con un par de hobbies…

domingo, 7 de marzo de 2010

Lucha de gigantes

Por muchas palabras que sea capaz de pronunciar y tantas formas de intentar explicar cómo me siento al tenerte tan lejos, no consigo acercarme a la realidad. Me cuesta tanto explicarte las veces que te pienso, que no lo concibo y a veces me enfado cuando no llamas a tiempo o suelto cualoquier estupidez que escapa de tu razón. Porque me siento tan vacío sin ti en estos momentos que te necesito cerca, porque ahora mismo eres mi soporte, mi sustento, lo único que me da calor y por lo que daría cuaquier cosa. Porque eres mi razón en este momento, porque todo lo que me has dado no tiene ni espacio ni precio, porque has conseguido aquello en lo quepienso cada anochecer y cada amanecer. Porque los dias aquí se hacen eternos etre llamada y llamada, porque ahora mismo mis días circulan en torno a ti.

Y me siento tan impotente al pensar en ti y no poder tenerte, y ello me enrabia y me entristece, y quisiera despertar delante de tu puerta para abrazarte tan fuerte y sentirte dentro de mí. REcuerdo cada día aquellos momentos que pasan a ser mágicos, e imagino otros futuros que consigan mejorar los pretéritos, y cada vez que lo hago mi cara se entristece, pero mi corazón late más fuerte porque te busca pero estás lejos, mas mientras lo haga significará que te necesito, que formas parte de mí y te siento como tal.

Y tú a solas has conseguido todo lo que es tan bonito que siempre merecerá la pena, pese a la disancia, pese a la tristeza, pese a malentendidos y demás estupideces sin sentido que entorpecen el camino, mas son incapaces de apagar este fuego que poco a poco va creciendo, que cada dia da más calor, que cada día ilumina más nuestro camino.

jueves, 4 de marzo de 2010

Recuerda

Cuántas veces estuvimos tan cerca que jamás pensabamos separarnos por un momento, cuántas veces te rodeaba con mis brazos y te estrechaba junto a mi con tanta fuerza que no podías escapar... La veces que te besé sin más y tu sonreías devolviendome el beso. La veces que nos mirábamos en el espejo y me acomodaba sobre tus hombros rozando tu mejilla. Cuántas veces jugamos a pelearnos y bromeábamos porque sí, sin motivo, sin razón, sólo disfrutando de momentos que eran sólo para nosotros.

Esos momentos parecían tan únicos y tan cotidianos que hoy se alejan en el tiempo y sólo provocan satisfacción, recuerdo de algo tan bonito que arrancan una sonrisa de mi boca mientras escribo, mientras te pienso, mientras evoco tu imagen frente a la mía y se reproducen esas miradas y esos gestos que jamás pensé que pudiera echar tanto de menos.

Y que jamás caiga en olvido todo aquello que un día nos hizo olvidar el resto para centrarse en uno. Que jamás caiga en el olvido porque aquello que da sentido a las cosas nunca debe olvidarse, aquello que se diferencia del resto por su propio significado, aquello que clama ante el resto por ser algo tan rotundo y verdadero que expulsa de sí toda banalidad y aúna valor en si mismo.

Todo ello lo disfrutamos tan a menudo que a veces se desdeña su valor, se pervierte su sentido y se juzga sin criterio. Por ello hoy y siempre tendré presente todo aquello que me llenó un día, todo aquello que mi retina guardó con tanta fuerza que en mi memoria reside fielmente su sentido y fin.

Un día regresaré a tí, y te abrazaré muy fuerte, y te besaré una y mil veces, y volveremos a olvidar el tiempo.